El curso termina y toca prepararse para el año que entra.
Tenemos la inmensa suerte de saber que el año que viene serán muchas más las escuelas que cuenten con nuestros servicios y que se introduzcan en el maravilloso mundo de la metodología por proyectos.
En esta semana he recibido tantas llamadas con dudas sobre los proyectos del año que viene que pensé que el teléfono explotaba. Y eso me hace tremendamente feliz.
Si, soy de esas que el trabajo la hacen sentirse genial y que pensar en todas esas nuevas propuestas le hacen querer dar más y apostar más fuerte si se puede.
Junto con las llamadas hoy he tenido el placer de conocer a unas nuevas compañeras de aventura.
La directora y coordinadoras de la escuela infantil Chicle de Sevilla han venido de visita para conocer de primera mano como se trabaja el día a día en una escuela con esta metodología tan especial. Y, como anfitrionas del evento ha estado la escuela Con C de Cariño, junto conmigo.
Creo que en una mañana de risas y charlas, nos hemos dado cuenta de la importancia de la comunicación entre escuelas, de conocernos, compartir conocimientos y ser una comunidad activa.
Me llevo el sentimiento de algo grande por venir. Ya lo iremos viviendo juntos.